Todos tenemos a alguien que nos escuche, un amigo, un hermano, tu pareja, tus padres. Pero yo a ella la recuerdo como la persona que solo le escuchaba el silencio, sus ojos avellana clavados en la nada. Tantos años vividos con ímpetu, con olor a tierra mojada, a lágrimas y risas, de ver como el mundo poco a poco se desintegra y sin darnos cuenta nos alegramos de ello. Camina con la cabeza gacha, todas las mañanas son iguales pero cada vez con menos aire que respirar, ya no estrena una sonrisa al asomarse por la ventana, ya la esperanza quedo enterrada bajo toneladas de mentiras y palabras de un necio. Siempre camina sola, los hombres la miran y no la entiende. Quedó muda de intentar luchar, de gritar por la justicia para solo ahogarse con su propia carga, para que nadie la recordara, tanto tiempo gritado en gritos sordos...
Ya no puede vivir y esta muriendo sin poder morir. Ya solo le habla a una hoja en blanco y un bote de tinta donde escribe siempre la misma frase.
"tantos años gritando en silencio, que incluso este se quedó sordo"
Pero todos callamos algo desde el más fuerte de los gritos hasta el total silencio de un mudo.
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