Aproveché una migración de pájaros silvestres para evadirme.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Morir en ti.

-Quiero morirme

Ella soltó el vaso e café bruscamente en la mesa, dejado así de leer el periódico.

-No digas eso, nadie lo quiere de verdad

-Pues yo sí-sonrió de forma burlona- y tú, aunque no quieras, también lo harás.

-Yo quiero vivir, pero porque estoy contigo. Deja de decir ya gilipolleces que ya eres mayorcito para esto.

Él rió, y le desabrochó un botón de aquella blusa celeste en la que se le transparentaba el sostén:

- Yo muero por no estar contigo, y tú por estar sin mí. Haces  que me pierda en tu selva que ya otros habitaron y me devoras sin piedad. Sin embargo tu siempre te escondes para que haga yo tus movimientos, y me siento un aventurero contigo. Vuelves vulnerables zonas de mi cuerpo a tus golpes. Y cuando no puedo más no te aguanto y me voy. Y es exactamente eso lo que me apetece hacer, irme, abandonarme a mí mismo.

-¿Insinúas que no quieres estar conmigo?

-No, insinúo que volvamos a la cama desnudos y me dejes morir en ti.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Relato del primer amor.

Ese olor que le resultaba tan familiar, ese nerviosismo que le provocaba al ver que había recibido un mensaje a través de una pantalla, volvió. El sabor amargo del fracaso recorría sus papilas gustativas, sabía que todo sería una desilusión, pero pese a los años pasados, pese a todo lo que había llovido desde entonces, le quería. Había llorado, reído y cambiado por él, pero fue su primer amor, su primera vez. Solo es una menudencia, pensaba pegada a la pantalla del ordenador, pero no obstante el corazón le latía a una velocidad irreducible, creía que en cualquier momento le estallaría el pecho. Sus manos temblaban, volvió una ilusión, habían pasado tantos otros por su vida, pero ninguno como aquel, era el único que le había hecho amar las palabras. Y el silencio se apoderó de la sala. Fracaso o victoria. Mandó su últimas palabras en aquel breve correo "es el único que me a echo amar". Hiperventilaba, casi lloraba, le temblaban las piernas y no le salía la voz. Recordó toda aquella historia, todas esas aventuras en aquel mundo donde solo ellos podían entrar. Una pestaña del ordenador saltó, tenía un mensaje nuevo. Le sabía a fracaso, pero confiaba en la victoria. Lo abrió y leyó "Es tuyo, si de verdad lo quieres tanto te lo regalo, quizás por fuera parezca duro y serio pero por dentro está lleno de amor y serenidad"
Lo sabía, ya había leido antes aquel libro.

martes, 20 de septiembre de 2011

las palabras.

 Hay palabras bonitas, palabras inútiles y palabras que hacen daño. Hay una palabra para cada persona y una palabra que reduce a millones de ellas. Hay palabras para un discurso, palabras de amor, de odio o sencillamente solo un puñado de palabras sin sentido. Pero una sola no tiene ninguna fuerza, la fuerza se la da el conjunto de ellas que ayudan a formar una frase. Probablemente sean la mayor arma, más mortífera que una bomba atómica. Una palabra dicha con maldad recorre cada tramo de tu cuerpo arañando tus oídos y bloqueando las tuyas, te mata poco a poco y solo durante milésimas de segundo. Pero no subestiméis el poder de las palabras de paz, de amor que todas pronunciamos alguna vez. Gandhi cambió el mundo con solo palabras y lo recordaran más que a cualquier soldado. ¿Sabéis por qué era tan sorprendente el movimiento del 15-M? por qué no empleaban otra cosa que la voz, la voz de los ideales, miles de personas protestando por una sola palabra, democracia. Hoy en día pensamos antes en usar un misil que viajar diez mil kilómetros y salvar millones de vidas con solo una charla. La palabra es la capacidad de expresar el pensamiento por medio del lenguaje articulado y la mitad de las personas ni siquieran saben de su importancia. Pero aunque lo supiéramos nunca llegaríamos a descubrir toda su fuerza si no llegamos sentirla.

-Dedicado a Luis Miguel Rojas, este texto no sería lo mismo sin su voz crítica, Gracias-